Bitácora 30/06/16, jueves , día 121, últimos preparativos para salir.
Después de desayunar, preparamos el barco para salir. Lo tenemos todo manga por hombro, el Mecanico viene por fin después de que comamos enfrente del puerto para ver cuando llegaba y nos dice que el alternador no carga, que es una pieza que no la tiene aquí y lo vuelve a montar y se va. Tendremos que cargar baterías solo con el generador y cuando vayamos a motor, solo se cargara la batería suya no las de servicio. Un gasto doble innecesario pero en medio del Atlántico y en Azores no tenéis muchas otras alternativas. Dedicamos la tarde a ir a hacer las compras de comida y bebida y nos las llevarán al barco mañana por la mañana y de camino nos encontramos un restaurante que habíamos visto en una de las guías que lo recomendaba y entramos e hicimos una reserva para una hora y media después, el tiempo que íbamos a emplear en volver al barco y pegarnos una ducha. Después de la suculenta cena a base de pescado y carne y las riquísimas lapas al grill, nos fuimos a tomar un café al lado de Peter el sitio de las copas, donde sobre una bandera de España, firmamos y dejamos nuestra huella para luego colgarla al igual que el resto de tripulaciones hacía desde hace más de cuarenta años en ese local. Cuando llegamos y se la dimos al actual dueño, descendiente del abuelo que inició esa tradición,nos regala una bandera suya del local y nos pone la nuestra. Nos hacemos unas fotos con él y nos tomamos unas copas hasta que aparece también Silvia y le decimos que al final nos vamos a ir mañana por la tarde pero que nos despediremos por la mañana. Cansados volvemos al barco. Sed buenos y propicios vientos tengáis.
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Bitácora 29/06/16, miércoles , día 121, haciendo amigos.
Esta isla nos está encantando. El ambiente de navegación es excelente. Cada dos por tres llega un velero, de banderas de todos los lados, Francia, Bélgica, Alemania, Canadá, etc. Van todos muy preparados. Se ve en las Bañeras todo tipo de Gadchets para la navegación. Velas de respeto repartidas por la proa. Bidones de combustible de respeto por todos los sitios posibles. E incluso si miras las tripulaciones, intuyes a gente diferente a la que puedes ver en un Nautico cualquier día. Todos son navegantes. Y están cruzando el Atlántico. Volvemos a comer a Peter Cafe, nos tratan muy bien y la relación calidad precio es buena. Por la tarde seguimos con las tareas de puesta a punto del barco y por la noche nos acercamos a cenar al Genuino, un restaurante que lo lleva un simpático tipo de unos sesenta años que ha dado la vuelta al mundo un par de veces en solitario y conversamos con el. Es un hombre con mucho mundo y a toda su clientela trata de hablarle en su mismo idioma. Conoce varios y tiene don de gentes. Para acabar la magnífica noche, nos tomamos varias copas en Peter, que hoy justamente esta muy animado porque tocan en vivo. Mañana más y mejor. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 28/06/16, martes , día 120, en Faial, reparaciones varias.
Desde que nos hemos levantado y hemos Ido a desayunar,no hemos parado, han venido a revisar el alternador pero de momento no se aclaran. Ayer se llevaron las velas y nos las han traído hoy ya reparadas. Limpiamos el barco y arreglamos varias cosas para tenerlo todo a punto. Comemos en la cervecería pastelería Luso una feijoada, diferente a la que estoy acostumbrado en Brasil pero estaba buena y después de mover el velero a otra posición y estar ya conectados a la corriente, empezamos a cargar baterias. Cenamos en Xf, un restaurante alejado pero con el mismo planteamiento que el de ayer pero mejor. Volvimos al Peter, centro de reuniones de todos los navegantes de por aquí y luego a dormir. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 27/06/16, lunes , día 119, llegamos a Azores. Ayer hicimos 108 millas, décimo quinto día de Bermudas/Azores.
En mi primera guardia, cuando sustituyó a Mauri me comenta que cuidado porque tenemos un grupo de barcos fondeados a nuestro estribor unas cuantas millas más a proa. Lo veo y le digo, no Mauri no, eso es tierra, son las islas Azores, concretamente Faial y Pico, lo que pasa es que estamos viendo las luces de la población y al estar a 30 millas nos parecen barcos. A nuestro babor sí que hay un barco, no sé si como nosotros o algún pescador. Aunque aún no hemos pisado tierra, ya hemos llegado. Lo difícil está hecho. Ahora queda atracar y ponernos manos a la obra para que nos solucionen las cosas que tenemos pendientes para poder largar cuanto antes. Hemos hecho 1.933 en casi 16 días, que sale a una media de unas 120 millas/día. Hemos tenido de todo, pero en conjunto ha sido una buena travesía. Llegamos directamente a la gasolinera, hacemos todos los papeles de entrada y nos dan un atraque abarloados como tercer barco, aquí es como exprimen al máximo el tema de los amarres. Pero estamos tan lejos de todo que no nos podemos conectar a la energía ni al agua por lo que mañana cambiaremos de sitio. Hoy vamos a comer en tierra a un bar mítico en las Azores, el Peter Cafe sport. Una institución aquí en la isla de Faial. Nos encontramos con Silvia, la navegante que vimos en Bermudas y nos explica un poco como va la isla. Hacemos las gestiones para que nos vengan a reparar el alternador y las velas pero ya será mañana. Aquí es típico pintar el logotipo, leyenda o el nombre del barco, la fecha y la tripulación y país de origen en todas las paredes y suelo del Nautico. La imagen es espectacular. Nosotros hacemos lo mismo y dejamos nuestra huella. Nos vamos a cenar a un restaurante cercano a l puerto que lo típico es que te pongan una piedra Volcánica caliente y tu mismo té haces la Carne. Perfecto. Nos tomamos una copa para celebrar la etapa complicada que acabamos de Hacer y nos vamos al velero a dormir. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 26/06/16, domingo , día 118, a 100 millas de Azores. Ayer hicimos 108 millas, décimo cuarto día de Bermudas/Azores.
Guardias nocturnas sin novedad, en la de la mañana he puesto combustible con los tanques de respeto, no tenemos aún así suficiente para llegar con seguridad a Azores, por lo que sacamos la mayor durante unas cuantas millas para garantizar que llegamos a puerto. El alternador vuelve a fallar y no cargamos batería. Vamos a revisarlo. Los peces siguen sin subir al barco. Amanece con un día gris y una fina lluvia aunque tenemos un anticiclón encima. Comemos pasta con tomate y atún. Mañana por la mañana llegaremos a la isla de Faial. Hay ganas. Allí tenemos que reparar el Génova, cargar combustible, agua y provisiones. Y salir de nuevo rumbo a Cadiz, unas 1.100 millas en línea recta que comparados con las casi 2.000 de esta, nos va a parecer un juego de niños. Creo que lo más complicado ya está hecho. Espero no equivocarme. Hoy el atardecer ha sido genial. Entre el horizonte y las nubes densas que había en el cielo ha entrado perfectamente hasta ocultarse. Para cenar, un plato inventado que consistió en pasta, cebolla pochada, atún, un montón de especias, semillas de chia, huevo duro y alcaparras y a la cama. Mañana será un largo día de hacer cosas. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 25/06/16, sábado , día 117, a 200 millas de Azores. Ayer hicimos 117 millas, décimo cuarto día de Bermudas/Azores.
Mis guardias a motor no revisten ninguna novedad. Me paso el tiempo tumbado en bañera, escribiendo o viendo alguna serie en la tableta. No hay barcos, no hay luces, no hay nada a la vista. Solo impertinentes olas que nos golpean sin cesar. Por la mañana un amanecer espectacular nos alumbra. Hace calor, y eso que hay nubes pero el clima es seco, estamos en el anticiclón de las Azores y lo notamos. Cada Vez estamos más cerca de la isla de Faial, nuestro destino intermedio. Para comer pasta con salsa de queso y otra de salsa tártara. Por la tarde, ponemos un cebo nuevo y tiramos la caña. Parece Mentira pero a diferencia de en el Caribe y subiendo Brasil que pescábamos siempre, desde que salimos de Cuba, nada de nada. Juego al ajedrez con Borja, y preparamos unos gintonics. La cena consistió en puré de patatas, huevo y salchichas. Nos quedan aún víveres, pero echamos de menos verdura, fruta y carne fresca. Vemos una película y empiezan las guardias. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 24/06/16, viernes, día 116, a 300 millas de Azores. Ayer hicimos 109 millas, décimo tercer día de Bermudas/Azores.
Como vamos con motor apoyados con mayor retenida, pues las guardias son bastantes tranquilas. El único riesgo que hay es que choquemos con algo y tiene que ser muy grande para que se nos complique la existencia. Por aquí no hay nada ni nadie. Solo nosotros. Solo se ve agua por todas partes y un botón de las olas que alguien lo ha activado a su máximo exponente y nos bate. He hecho durante el día un pr de cafeteras americanas que cuando ya estaba por la mitad, la ola, mueve el barco 40 grados hacia una banda y luego a la otra que derriba todo a su paso. A la mierda el café por toda la cocina, las neveras, el suelo. Ya me ves recogiéndolo la primera vez. Pruebo con la segunda y al cabo de unos minutos lo mismo. No hay más café por hoy. Sigo escribiendo, estoy siendo muy prolífico. Cuando no leo, veo alguna serie, descanso o hago la comida. Hoy nos hemos comido el arroz con salsa picante y para cenar hervido de patata, cebolla, con maíz, atún, pimientos asados y huevo duro. Y empiezan las guardias nocturnas. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 23/06/16, jueves, día 115, a 400 millas de Azores. Ayer hicimos 120 millas, duodécimo día de Bermudas/Azores.
Mi primera guardia sin novedades, noche de luna, estrellas y viento que ha rolado y nos está llevando al destino casi en línea recta. Todo perfecto. En mi segunda guardia después de tomarme un café y un Sandwich de jamón y queso, cuando ya se había bajado Mauri y Borja estaba durmiendo, veo con sorpresa que el Génova se ha descosido por una de las costuras y va desde la baluma hasta el stay con riesgo de romper y hago sonar la bocina de niebla que siempre llevamos en bañera y que significa que todo el mundo debe estar en bañera lo antes posible porque tenemos problemas. Cuando aparecen, ya estaba preparando la maniobra de recogerlo, y lo hacemos sin dificultad, pero el viento que sopla en ese momento unos 15 nudos con una ola que nos golpea insistentemente, hace que con solo la mayor arriba abatamos más de la cuenta y nos alejemos del destino y solo navegamos a unos dos nudos. Cargamos combustible con los tanques de respeto y nos da para llegar a motor a Azores. Porque las soluciones propuestas para ir más rápido como es quitar rizos de la mayor y llevar todo el trapo, con el consiguiente riesgo de que el viento suba y la rompa o la segunda opción que es si baja el viento, arriar el Génova para poder coserlo nosotros, también genera dudas por la efectividad de nuestro cosido h sobre todo porque en la Maniobra de arriada se nos puede romper y tener un grave problema como la otra Vez que no lo podíamos bajar. El día transcurre golpeando a las olas que nos vienen de proa, parece que el barco choque con algo físico y muy duro. En el camarote de proa se siente perfectamente. Nos pica algo realmente grande en la caña que se lleva rápidamente el sedal hasta que cuando llegó a detenerlo Lentamente, se corta por la fuerza que el Bicho ha ejercido puntualmente. Hacemos pasta con tomate y pepino naturales y aceite de oliva. Y después de la mini siesta, yo sigo escribiendo como desde que me desperté en la segunda guardia y enrollamos el Génova. para luego a Continuación ver un pr de capítulos de la serie bélica El Pacífico, hasta la hora de la cena que consistió en sopa de fideos y un Sandwich de atún con mahonesa. Nos quedan mano de 350 millas y la idea es poder llegar el domingo a Horta en la isla de Faial, pero ya veremos, vamos demasiado caídos y lo mismo tomamos alguna otra alternativa. Empiezan las guardias. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 22/06/16, miércoles, día 114, a 500 millas de Azores. Ayer hicimos 95 millas, undécimo día de Bermudas/Azores.
En la guardia nocturna hace una noche espectacular, luna llena que alumbra el mar y el cielo completamente lleno d estrellas, encima nuestro la osa mayor y la menor apuntando a la estrella polar. No hace casi frío, no hay ola y con unos ocho nudos de viento vamos a seis de velocidad, creo que por una corriente que nos impulsa. La segunda guardia con un amanecer fantástico, nos revela un día prácticamente sin nubes, un viento establecido de diez nudos que aunque no vamos a rumbo directo, nos lleva s buena velocidad. Estoy siendo bastante prolífico con la escritura del libro. Desayuno y me pongo enseguida manos a la obra. Pasan las horas y mientras controlo el velero, le doy al ordenador. Durante todo el día de hoy, hemos probado distintos cebos para ver si algún pez pica, pero todo ha sido en vano. Después de comer un arroz con cerdo picante nos han visitado un par de delfines y en la siesta, me despierta Borja diciendo que hay ballenas. Y efectivamente, salgo y un pr de ejemplares a unas cinco esloras nadan perpendicular a nosotros, no han notado nuestra presencia, porque en el momento que lo han hecho, se han sumergido y ya no las hemos vuelto a ver. Increíble experiencia ver a esos grandes animales tan cerca. Por su parsimonia podíamos haber chocado con ellas si se hubieran adelantado un centenar de metros, menos mal que no ha sido así. El susto para ambos hubiese sido terrible. Cae la tarde, hemos adaptado el horario a Azores, son dos horas menos que en Espsña y cenamos viendo un atardecer mágico, tan solo con unas pocas nubes que dan la tonalidad perfecta al ocaso. Y también vemos a un carguero que va destino a América. La cena consistía en una tortilla de patata española y pinchos morunos. Para acabar el día, nos hacemos el primer gintonic de la travesía. Empiezan las guardias. Sed buenos y propicios vientos tengáis. Bitácora 21/06/16, martes, día 113, a 500 millas de Azores. Ayer hicimos 120 millas, décimo día de Bermudas/Azores.
Anoche el viento era muy flojo y tan solo hacíamos uno o dos nudos de velocidad. Se ha ido al norte y eso nos dificulta seguir el rumbo además de que nos trae un aire mucho más frío. Las guardias las hacemos detrás de la capota antirociones protegidos de la humedad y el viento o dentro saliendo cada dos por tres para otear el horizonte y comprobar que no hay nadie como siempre. Hoy, el día más largo en el hemisferio norte y la entrada del verano y el más corto en el sur junto con el invierno, sería el cumpleaños de mi amigo Happy, que falleció en un desgraciado accidente laboral hace ya más de seis años y que es una de las personas que conozco que más le apetecería acompañarme en esta travesía. Nos iniciamos juntos en la vela y fuimos amigos inseparables durante más de 25 años, viviendo mil y una aventuras y siendo uña y carne. Cuando estoy en medio del Atlántico y te das cuenta que eres una microgota en la inmensidad del océano, entonces y solo entonces te das cuenta lo importante que son ciertas cosas y la imbecilidad que son la mayoría. Vamos demasiado abajo de nuestro rumbo ideal y tendremos que virar en algún momento. Nuestra proa en vez de apuntar a Azores, apunta más abajo de Canarias y esos son muchos grados de diferencia. Decidimos al final, dado que tenemos que cargar Baterias, aprovechar y al meter motor, arreglamos el Génova dándole más vueltas al enrollador, cargamos 300 litros de agua con los tanques de respeto que llevamos en el auxiliar y sube Borja a la primera cruceta a deslizar un cabo con el lazzybag. Y como estamos en medio del Atlántico, casi parados, con la mayor vamos a tan solo un nudo, decidimos bañarnos desnudos. Dicho y hecho. Un lujo que muy pocas personas en este mundo podrán decir que se han bañado en medio. Y tenemos fotos y vídeo del acto. Después nos hemos pegado una ducha en bañera y como nuevos. Mientras, Mauri nos estaba esperando con carne a la plancha y Polenta con queso chedar. La siesta no se ha hecho de rogar nada. Uno de guardia y el resto a dormir un poco. El viento flojo que viene de nordnoroeste no nos mueve demasiado pero no tenemos más remedio que aguantar y seguir. A medida que transcurre la tarde el viento hace acto de presencia aunque seguimos bastante caídos de nuestro destino pero aprovechamos por lo menos para correr. Hemos hecho hielos y hemos brindado con un poco de ron y whisky por la entrada del verano. Para cenar he hecho una sopa de cebolla con huevo y la ensalada de pasta que sobró ayer. A lo lejos, debajo de la luna, divisamos las luces de un carguero. Hacía días que no veíamos nada ni a nadie y hoy también hemos visto un avión. Se ve que estamos en la ruta comercial o muy próxima a ella. Empiezan las guardias. Sed buenos y propicios vientos tengáis. |
AuthorOscar Lopez, adventurer spanish sailing around the world. Economist, Aircraft pilot, sailor, rallys, biker, diver, 4x4, rider, skier, runner. I love to discover new places and interest people. Now writing 2 books. Archives
Noviembre 2017
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