Bitácora 24/05/16, martes, día 85, salimos dirección Bermudas

Bitácora 24/05/16, martes, día 85, salimos dirección Bermudas
En el hotel de Guardalavaca, después de desayunar, nos descargamos toda la información que precisamos para hacernos a la mar con seguridad y al regresar ya con nuestro hermano Vitico en el taxi nos acompaña para comprar provisiones y ahí es donde te das cuenta de la pécariedad en la que viven muchos Cubanos. La tiendas son minúsculas y prácticamente no tienen de nada. Si cualquiera de ellos fuera a alguno de nuestros supermercados moriría de un infarto al corazón en pocos minutos. Aquí no hay ni cantidad ni la mayoría de cosas que precisamos, y aún así, cargamos lo más preciso y lo estibamos a bordo y pertrechamos el resto,
Nos despedimos de los argentinos Soledad y Fede que emprenden su camino por tierra y tras liquidar con la marina y haber cargado combustible, avisamos a las autoridades para que vengan a hacer todos los trámites. Viene como siempre los de capitanía, acompañados por dos perros y sus guías, un buceador y desde que salimos de nuestro amarre hasta abandonar unas 3 millas la Costa de Cuba, hemos tenido una embarcación vigilando al lado y cuando han visto que hemos sacado todas las velas poniendo rumbo a Bermudas cruzando Long Island, una de las islas desiertas de Las Bahamas, han dado media vuelta y se han ido. Control exhaustivo de su trabajo.
Pero Cuba nos ha encantado, su gente, su comida, su trato, la verdad que nada que reprochar, todo lo contrario. Estoy seguro que volveré.
Nos pilla nada más salir un buen aguacero y una tormenta eléctrica nos tiene rodeado y es un verdadero espectáculo el ver un rayo cerca pero más aún, cuando simultáneamente aparecen una decena de rayos alternándose y recorríendo nuestro horizonte. Menos mal que estaba lejos y nosotros vamos en dirección contraria que si no, hubiese sido mucho más peliagudo.
Empezamos las guardias tras la merienda cena, que al no haber comido por todas las cosas que teníamos que hacer, hemos devorado en décimas de segundo.
Sed buenos y propicios vientos tengáis.